El mítico Lhardy, inaugurado en 1839 como primer restaurante de lujo en Madrid, se ha renovado este año para recuperar su esplendor y seguir siendo emblema de la alta cocina española e internacional.
Del mismo modo que en su carta conviven platos clásicos y nuevas creaciones, el interiorismo del remodelado Lhardy –a cargo de Fran Cassinello (Estudio Mandalay) –, también honra los orígenes, a la vez que aporta frescura y personalidad a cada una de las estancias de este local histórico.
Un buen ejemplo son los baños, cuyo revestimiento de mármol, protegido como patrimonio, luce todavía más con el actual diseño. Esto se ha conseguido con grandes espejos, imponentes lavabos de pedestal y piezas con carácter propio como la grifería AXOR MyEdition, monolítica y con depuradas líneas rectas, y AXOR Montreux, industrial e inspirada en la Belle Époque.
Ambas pueden verse en el Lhardy en el modelo de mezclador de 3 agujeros en oro cepillado y níquel cepillado, dos de los múltiples acabados que ofrece AXOR a través de su servicio de individualización FinishPlus. Estos acabados resaltan por su brillo y alta calidad, recubriendo una grifería que también destaca por su uso eficiente del agua (consumo de 5 l/min) e innovadores tipos de chorro, como la microlluvia (PowderRain) de AXOR MyEdition o las gotas enriquecidas con aire (AirPower) de AXOR Montreux.